Filed under: horticultura | Etiquetas: Artabria, Blas de Lezo, Galicia, Gimonde, limon, Pedro Martín Zermeño, Puticlú
En primer lugar disculparme una vez mas por la ausencia de mis ediciones digitales y espero que os guste, lo cierto es que he tenido mucho trabajo, me he tomado el trabajo de leerme unos impresionantes legajos del siglo XVIII y he de reconocer que esos cientos de folios han absorbido casi completamente mi tiempo. Espero que lo entendáis y veréis que le sacare provecho para la bitácora a continuación va el post espero lo disfrutéis y veáis la pista de futuros post.
Al inicio de la primavera de 1791 un sueño había concluido en el Artabro refugio, en un amanecer en el que los heliocéntricos rayos deslumbraban la placida bahía tiñéndola de los más fabulosos tonos de luz indescriptibles al albor .
Ese día un largo y funesto séquito de carruajes de bestias, encabezado por una elegante berlina londinense portada por cuatro fuertes mulas alimentadas en los sanos pastos del río Monelos. Mulas arriadas por el tenaz viejo Manuel de oficio cochero, sentado sobre la almohadillada de la encuerada silla inglesa, teñida de rojo acompañado por el imberbe Manuel de oficio lacayo, guiaban la voraz comitiva que huía del sueño del paraíso, en el interior de la abrigada berlina para encorsetarse en la arzobispal ciudad compostelana, viajaban la joven viuda,” La condesita Gimonde” y el tierno infante Jacobo Martín Zermeño . La larga comitiva pisoteo con ligereza las numerosas flores que adornaron la villa ilustrada de los generales, aquellos generales ilustrados que habían fortificado el floreciente imperio de los Borbones, aquellas bestias pisotearon ilustrado edén de los Martín Zermeño, las bestias pisotearon, las mas exóticas plantas que nutrieron y regalaron los ojos profanos , neófitos, ignorantes ante el sentimiento inexplicable de practicar el arte de ver las flores. Aquel día de primavera se piso por primera vez el sueño del general realmente. Sabe Dios también, que fue de los animales exóticos que poblaron el paraíso, los indicios me indican que Don Pedro Martín Zermeño no solo pretendía realizar unos jardines florales, sino también un hortus Botanicum , un jardín mitológico e incluso un jardín zoológico, quizás con el sueño de inculcar una enciclopédica sabiduría a su amado hijo único Jacobo. .
El viejo general don Juan y su hijo Don Pedro habían sido ingeniosos hombres que tras la victoria de Don Blas de Lezo en Cartagena de Indias, habían podido surcar los mares y consolidar la gloria de la monarquía ilustrada mediante inexpugnables muros pétreos, que guardarían en su interior los mas fabulosos tesoros materiales que se puedan acaso fabular o relatar mente humana, fueron hombres valerosos que embarcaron con su razón y herramientas, en los mas avanzados navíos impulsados por los voraces labios de Eolo, en el siglo de las Luces, avanzados navíos de primera linea construidos en los Reales astilleros de Esteiro.
Aquel día, el sueño de un hombre que amo estas bendecidas tierras de Oza se trunco. En sus tierras se perdió su memoria y trascurridos dos siglos y dos décadas el lodo que ha empañado su memoria se ha empezado recientemente a limpiar .Aunque espero sinceramente que su ultima voluntad de ser enterrado en estas tierras sea cumplida, recientemente visite su tumba y mi corazón se estremeció al saber que mis admirado general yacía bajo esa fría e impersonal lapida en contra de su voluntad escrita. La voluntad de Don Pedro Martín Zermeño y García de Paredes, Gobernador y Capitán General de Galicia y General Jefe de los ingenieros del Rey, un hombre sabio, honrado ,generoso y amante de la Agricultura así como constructor de la mayor fortaleza del siglo XVIII. Que en estas tierras fundo su casa.
Este sábado pasado se inauguro sobre los restos de la antaño casa de san Juan de las brañas del rio Monelos y la huerta del general , una primera parte del futuro parque de Oza, con una extensa área de juegos, en la que pude balancearme sobre el impresionante esqueleto de un Titan encadenado, que regalo la luz a los hombres para ira de los Dioses, el Titan Prometeo, un Titan amigo de los hombres.
Tras el balanceo correspondiente, mi amigo el delicado reputado gastronomo y taxonomo Don Santiago Rivadulla me invito a un refrigerio y con su voz atiplada, me explico que el refresco estaba tan sublime debido a la rodaja de un cítrico autóctono de Oza , me explico que solo nace en estos pagos debido a nuestro espectacular microclima , siendo fácilmente reconocible por ser mas redondo y aromático que el resto de los limones, siendo pues la invitada al post de hoy el mas que delicado y sublime Citrus x limon variedad “Zermanensis” . Placeme dedicarle este a mis vecinas de corrala Nati y Cris que estan de cumpleaños y con las cuales menee el esqueleto este sabado de noche en la impactante sala Puticlú acompañado de la fauna mas cool de la bella Artabria.